Tiembla ante la llegada
de esa voz asquerosamente familiar.
"Chiquita" le dice
y ella va con la cabeza gacha.
Se traga una palabra tras otra
consumiendo veneno puro
asqueada por la rabia.
consumiendo veneno puro
asqueada por la rabia.
Tiene los labios marchitos
oscuros y herrumbrosos
de tanta humedad salada.
El odio se perfila en su ojos
encendido como fuego
en sus pupilas carmesís.
Tiembla, él la toca
mientras desgarra su inocencia.
"Calladita" le dice
y ella se muerde la lengua para no gritar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario